Como todos los discos de Los Violadores, que siempre me parecieron más rock que punk, este disco de Stuka cumple también con esa premisa...
Stuka canta, toca y sale airoso, mucho mejor que otros rockeros de producción no tan constante que vuelven o se reconvierten...
La banda suena precisa y ajustada... Me hace acordar al Iggy Pop que salía de los '80 y se metía, de manera más contundente, convencida, al (punk) rock de los '90...
Por último, me resultó más llamativa la primera mitad del disco (con saxo, cambios de planos, escalitas y arreglos bien rockeros, etc.) que la segunda, pero eso, como siempre, es a piacere...
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